lunes, 18 de abril de 2011

La risa, remedio infalible

Quién en este precioso mundo sigue creyendo que las mujeres somos buenas del alma?
Quién en su inocencia  sigue pensando que jamás de los jamases revelaríamos pormenores de una pareja cual secretaria a su jefe?
Quién cree que por tener sentido maternal desde el nacimiento, no nos burlaremos de sus defectos físicos ( y que los abandonemos por tenerlos)?
Es hora que dejen eso atrás. Cambien la perspectiva y  enfrenten que estamos de regreso: Somos malvadas. (no por nada nos dicen brujas)
No es una crueldad. A quién engañamos? Nos gusta la chamuchina, reírnos de todo y de todos y lo mejor: sacar a la luz nuestros más ocultos sentimientos (inhumanos). En palabras sencillas: Superficiales.
La Maca por ejemplo (otra vez ella) cuando conoció al Pancho, se gustaron inmediatamente, se llevaban bien, era una pareja envidiable y hasta puedo decir que esperaba  que perduraran en el tiempo. Lindo él. Tenía una venda en su mano derecha la noche de la fiesta.
Cuando nos volvimos a juntar en esas tardes de aquelarre, un par de meses después, la muy diabólica ya había terminado su relación.
Y yo que pensé que llegarían al altar. Cuál fue el motivo?   Le pregunté inquieta.

Le faltaba la mitad de un dedo. Se queda pensativa y agrega: Tarde o temprano pelearíamos y le gritaría sin compasión nueve y medio.
Su respuesta hizo que me retorciera de risa. Y empezáramos el pelambre poniendo sobrenombres de todo tipo al desafortunado hombre incompleto.

Después de eso, recuerdo que la Pía y yo salimos, por separado obviamente, con el mismo tipo. Todo un galán canchero él, que se creía el más mino de los minos, yo lo encontré agradable la verdad, pero no podía aguantar la risa cada vez que  abría la boca. Y no es que tuviera los dientes chuecos y mal aliento, el problema es que pronunciaba las eses como zetas. Imagínenselo. Les juro que hasta el día de hoy nos reímos de él. (Favor leer con z)
“Dezde ziempre zoy azi de zociable” , “quiero que zepas que zoy un hombre zencillo”
No pude con eso. Fue la primera y última vez que salimos.
No es que sea un inconformismo femenino ni que nos creamos minas alfa…la verdad es que somos malas y desanitadas. Algo sarcásticas también. Pero seguimos siendo unos bombones.

En cierta medida, nos hemos reído de todas las situaciones que se nos puedan ocurrir. Hay algunas que a veces  nos vamos al límite de lo inadecuado hasta convertirlo en metida de pata. Como aquella vez en que en plena y larga faena amatoria donde yo ya  había experimentado sus buenos orgasmos (en el sentido plural de la palabra), y a mi compañero al parecer le quedaba para rato (un prodigio él), comienzo con mucho entusiasmo y poco tino a cantar el tema de un comercial de Soprole: “Lo podemos lograr, lo podemos lograr, si encontramos la fuerza para vencer y para avanzar”, muerta de risa.  Demás está decir que no lo repetí en el futuro. Golpe bajo. Porque ustedes saben, si se demoran poco y se lo dices, ego herido, si se demoran mucho, también, ego herido. Mejor hablar de ellos a sus espaldas.
Así pasa también cuando nos hacen jurar de guata que guardaremos el más absoluto silencio antes de contarnos algo y/o después de que los pillamos en alguna patraña. Nosotras, como siempre tan bellas, “obedecemos” sin chistar, y con nuestra mejor cara de inocencia lo prometemos. A las horas nuestras más fieles amigas saben si el macho se sacó la cresta, si eyaculó a los dos minutos (o menos), si chocó el auto, si tiene algún lunar poco agraciado, si no alcanzó a llegar al baño y se cagó los pantalones, si se mira al espejo contemplándose el poto, calugas y bíceps, , que te habé como guagua, o peor, que le hable al pene.
Otro tema también es las cosas que te dicen o las preguntas que hacen mientras mantienen relaciones:
Dale mami!(de moda con el reggeton) …que weá más incestuosa, te imaginas a la madre montada encima de él y es tan matapasiones que te lleva a la abstinencia.
Te gusta? O Cómo lo hago?…
Obvio que me gusta, si no, no habría abierto las piernas . Y cómo lo haces? Si te vas a poner a hacer preguntas weonas mientras ejecutamos el acto amatorio, calladito lo haces mejor.
Y así, suma y sigue.
Nos burlamos. Es un arte. Y eso  para que después no digan que no tenemos sentido del humor.

1 comentario:

  1. Te falto tu frase ... y ya sabeen, lo mejor esta por venir jajajajajaajaj.
    somos muy malditas aveces cuando nos buscan, cuando nos tratan bien respondemos como tal, sabemos ser derecha cuando vemos que las otras personas lo son tambien. en fin.

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